Los tomates se procesan con la sola adición de una hoja de albahaca fresca y sin sal añadida. El proceso es muy sencillo y permite disfrutar del mejor tomate fresco del verano en la temporada de invierno. Es una salsa lista para usar, sólo hay que calentarla y añadirla a la pasta con un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Además, es una excelente base para elaborar sabrosas recetas.